- 12/03/2018 -
Llegas a casa, después de mil aventuras durante el día, y de las primeras cosas que haces es quitarte los zapatos y suspirar aliviada. Te pones las zapatillas blanditas y estás mucho más cómoda. ¿Por qué un bebé no sentiría lo mismo?, ¿Estarías en casa con un calzado que te molestase?, ¿Por qué aguantamos ciertos zapatos que nos duelen, nos hacen andar raro e incluso nos hacen yaga pero los queremos llevar a toda costa aunque sea con tiritas? Esto daría para un blog entero, pero el artículo de hoy va sobre el calzado infantil y sobre lo que vamos a poner en sus piececitos.
Importante: Lleva tanto tiempo como puedas los pies de tu bebé descalzos, al aire libre en verano, y con calcetines en invierno, "deditos-free”, déjale que use sus pies como pincitas para coger cosas, deja que abra los dedos como hace con los de las manos y que pueda gatear y ponerse de puntitas en toda su expresión. ¿Cómo va a hacerlo si le ponemos un zapato-bloque que le impide mover las articulaciones?
En la tienda solemos hacer la comparación con las botas de esquí. Si tú te las pones, sí, te sujetas de lo lindo, pero prueba a andar armoniosamente… Muchas zapaterías os recomendaran calzado duro de tobillo, pero nosotras en La Mamavaca no los tenemos, no nos gustan. Nos gustan los zapatos blandos, ergonómicos, que acompañan el progreso natural de patrón de marcha, no que les mantienen como tentetiesos, aquellos juguetes con plomo en los pies que por mucho que las quieras tumbar mantienen su verticalidad. Que se aguanten de pie cuando su cuerpo lo pida, no cuando lo digan los zapatos. Yo tenía más de 18 meses cuando me solté a andar y no me pasa nada raro. Cada peque tiene su ritmo y nos gusta respetarlo.
Ahora te vamos a contar las 5 claves para escoger calzado infantil:
1.- Tobillo: Los zapatos de corte bajo o tobillo blando permiten fortalecer de manera natural los tobillos. Tienes que poder doblar fácilmente el talón del zapato con los dedos, la zona del contrafuerte.
2.- Suela: Una suela plana, flexible y que se pueda doblar hace que el pie se mueva de forma natural como si caminase descalza/o. Los zapatos no deben tener plantillas con puente, los pies de los peques no tienen puente, ya que éste se tiene que formar de manera natural. Si el zapato tiene plantilla con puente estás creando un puente “forzado”. La suela no tiene que medir más de 5mm.
3.- Sujeción: Una sujeción ajustable en lugar de fija ayudará a que el hueso metatarsiano y los tejidos se desarrollen naturalmente. Así es el zapato el que se adapta al pie y no el pie al zapato.
4.- Medida: Los dedos necesitan espacio para crecer y moverse así que no elijas una talla que le toque en la punta de los dedos sino que dejamos más espacio para el crecimiento (1 centímetro).
5.- Cantidad y calidad: Para gustos colores, pero elige materiales resistentes y buenos acabados. Menos es más. No hace falta tener más de 1 o 2 pares. Les crece el pie tan rápido que alucinas (la media es de unos 4 meses). Compra poco y compra bueno.
Si no sabes la talla del pie de tu peque, tranquila, cada marca talla diferente, mídele el pie en centímetros del talón al dedo gordo o dibuja una plantilla en una hoja y llévatela contigo si no te puede acompañar tu hija/o contigo en vivo y en directo a probárselos. En tienda tenemos un medidor pero como te digo puede que de una marca tenga un número y de otra marca otra talla.
Antes de adoptar zapatos de tus amistades, familia… mira bien que no estén deformados. Somos fans del reaprovechamiento pero en tema zapatos es importante que si ya se ha andado con ellos se compruebe que no estén en mal estado.
Desde el año 2006 vendemos calzado infantil, si contáramos todos los pasitos que se han dado gracias a nuestro acompañamiento podríamos decir eso de “To the moon and back” así que si no estás muy lejos ven a vernos o navega por la web, te asesoramos por teléfono y te ayudamos a escoger el mejor zapato para ti. Encontrarás la marca Bobux, Rodia, Zapato Feroz y nuestras maravillosas Attipas para el gateo y primeros pasos.