- 06/03/2018 -

La Mamavaca participa en la Vaga Feminista del 8 de marzo porque denunciamos la brecha salarial, la feminización de la pobreza, la doble y triple jornada de las mujeres, el sexismo, el machismo, las agresiones sexuales y la discriminación de género en el sistema educativo.  

Cómo lo haremos:

1.- Haremos huelga por turnos. No bajamos la persiana todo el día porque somos un pequeño comercio de mujeres autónomas y emprendedoras y para nosotras abrir también es reivindicar la precariedad del sistema, las dificultades de conciliación familiar-laboral y porque La Mamavaca es un espacio de relación y práctica política que queremos ofrecer a todas. Abriremos a las 11h para tener más tiempo para estar con nuestros peques y organizarnos. Quien no esté en la tienda irá a la Mani por la tarde.

Aprovecharemos para cuidar de nuestra tienda hablando de cómo estamos, de cómo nos sentimos, de cómo vemos el futuro.

Pintaremos a la Vaca Margarita que ya está arreglada pero le falta una mano de pintura.

2.- No contestaremos al teléfono ni a los correos electrónicos. No publicaremos en las redes sociales.

3.- Colgaremos el delantal fuera para reivindicar que las mujeres cuando acaban de trabajar fuera de casa lo seguimos haciendo dentro de casa. Es un trabajo completamente infravalorado que sobrecarga a las mujeres y favorece al sistema heteropatriarcal y capitalista.

3.- Ofreceremos puertas abiertas en todos los horarios de las clases de Yoga para que puedas tener un espacio de relación y consciencia con otras madres. Puedes venir gratuitamente a hacer una clase de yoga con barriga, sin barriga o con bebé. Consulta los horarios en la web y si puedes avísanos para que podamos gestionar bien el aforo.

4.- Puedes venir a dar el pecho o el bibe, a cambiar un pañal o a hacerte una infusión. Puedes venir a reir o a llorar. Puedes venir a sentarte en el sofá o a usar el baño. (Esto es aplicable a todos los días del año).

5.- Te instamos a no consumir lo que no sea necesario. Se calcula que el 61,47% de los desplazamientos de consumo cotidiano está realizado por nosotras. Dejar de hacerlo es una manera de reivindicar esta labor invisible.

Toma consciencia de la gran desigualdad existente entre hombres y mujeres y a haz algo para cambiarlo. ¡Entre todas lo lograremos!